Entrevistas

Gabriel Matías: «Quería bailar por guajiras porque es un cante de idas y vueltas, como yo»

El bailaor y coreógrafo brasileño presenta ‘Terra’ en el ciclo Bailar en la Berlanga

El bailaor brasileño Gabriel Matías presenta ‘Terra’ el viernes 5 de abril en la sala Berlanga de Madrid, dentro del ciclo Bailar en la Berlanga. Con Lisi Sfair como bailaora invitada, el joven coreógrafo apuesta en este espectáculo por un baile sincero e íntimo, revisando el repertorio del baile flamenco tradicional desde una perspectiva personal, haciendo hincapié a los palos flamencos ‘de idas y de vueltas’ que, como él, van y vienen. Cante, baile y toque en su forma más auténtica.

¿Qué es ‘Terra‘?
Terra‘ es un recital de baile flamenco. Me he basado en el concepto de lo que significa la tierra para el baile, la importancia del suelo, del peso… Pero lo busco desde mi punto de vista, lo llevo en diferentes acepciones: la firmeza de los pies la encuentro en las manos para acariciarlas; también me inspiro en la tierra de donde vengo, Brasil, y en la que estoy, España, y me permito jugar con estos concepto derivados de la idea de tierra, que en portugués es «terra».

¿De dónde surge la pieza? ¿Cuál es la primera idea?
El espectáculo nació a raíz de un encargo para que creara un recital de baile flamenco para el Festival Suma Flamenca de la Comunidad de Madrid 2023. La primera idea fue la guajira, que es la primera escena de la obra. Tenía claro que quería bailar por guajira por ser un cante flamenco de idas y vueltas que como yo «voy y vengo” entre Brasil y España. Es un ritmo del flamenco poco ejecutado por los hombres y me picaba el reto de hacerme a este palo

A nivel estético, ¿qué es lo que vamos a ver?
Es un recital de baile flamenco tradicional que sigue los cánones: el baile, toque y cante están muy presentes. Partiendo del lenguaje de la tradición, he querido plasmar mi identidad como bailaor.

Respecto a tu trayectoria, ¿esta nueva pieza supone algún cambio significativo?
En el espectáculo anterior, ‘Ellos’, rendí homenaje a tres bailaores que hicieron historia en el flamenco. Fue muy enriquecedor profundizar en sus estilos, al cual me siento muy identificado, pero, en cierto modo, estaba ceñido a sus formas y a sus conceptos acerca de la escena, del baile y del flamenco en sí. En ‘Terra’ he querido dar voz a mi forma de bailar e interpretar la tradición. Busco mi propia personalidad como bailaor, aunque considero que es una búsqueda que se perpetúe en la vida artística, es un paso importante para mí.

Comenzaste a bailar de pequeño. ¿De dónde te viene la inclinación por la danza?
Empecé a bailar por casualidad, no tengo ningún antecedente artístico en mi familia. En Porto Alegre, mi ciudad natal, mi madre se apuntó a una academia que enseñaba flamenco. Yo tenía 11 años y le acompañaba a una u otra clase y, muy poco a poco, me picó el gusanillo del flamenco y empecé a bailar. Me enamoré de inmediato.

¿Qué es lo que te atrajo del flamenco?
La música del flamenco fue lo que me llamó la atención. La fuerza del cante, el toque, la percusión, el zapateado me emocionaba.

¿Qué presencia tiene el baile flamenco en Brasil?
El baile flamenco está presente en muchas ciudades de Brasil, ya sea en los tablaos flamencos o en compañías especializadas pero, sobre todo, en las academias. Es un arte que está creciendo mucho allí. Brasil mantiene una fuerte ligación con el flamenco de España que se refuerza en los numerosos festivales que, anualmente, ofrecen cursos y espectáculos con maestros españoles.

En 2015 te mudaste a Madrid. ¿Qué recuerdos tienes de ese cambio?
El recuerdo que tengo es la inconsciencia que tenía acerca de mudar de país, de dedicarme al flamenco en España siendo un extranjero, de aprender a llevar uno mismo las riendas de su vida. Pero tenía como aliado la fuerza, las ganas, la voluntad, la ilusión – y ,de alguna forma, la inocencia – propias de la edad de un veinteañero. Lo haría todo otra vez.

¿Qué relación mantienes con tu país? ¿Sueles actuar en Brasil?
Brasil fue donde empecé a bailar y es donde tengo mis raíces. Mantener una relación laboral activa con mi país es muy importante pues quiero formar parte de la escena flamenca brasileña, contribuyendo y aprendiendo. Una vez al año realizo una gira por diferentes ciudades de Brasil impartiendo cursillos y presentando espectáculos.

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