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Hongaresa de Teatre estrena ‘Tula divina caótica Tula’

Hongaresa de Teatre reivindica a la mujer más relevante de la lengua española del siglo XIX, Gertrudis Gómez de Avellaneda, con el estreno de la obra ‘Tula divina caótica Tula’, que tendrá lugar los días 11 y 12 de marzo en la Sala Matilde Salvador de la Universitat de València.

 

Gertrudis Gómez de Avellaneda, conocida como Tula entre sus íntimos, es la mejor y más desconocida dramaturga española del siglo XIX. Autora de relatos, poesía y teatro, fue la primera mujer nominada para formar parte de la Real Academia de la Lengua Española, pero su género provocó el rechazo a su candidatura. Lola López la reivindica ahora en un montaje en el que se entremezclan la vida y la obra de esta magnífica autora.

El espectáculo, titulado ‘Tula divina caótica Tula’, se ha programado los días 11 y 12 de marzo en la Sala Matilde Salvador de la Universitat de València. La fundadora de Hongaresa de Teatre asume la dramaturgia, la dirección y el protagonismo. Sobre las tablas le acompaña el actor y cantante lírico Javier Lázaro, quien dará vida al hermano de la autora, Manuel, y a otros personajes relevantes de su vida y su obra.

Tula fue una mujer adelantada a su tiempo, que escapó de tres matrimonios concertados y de una existencia prediseñada para dedicar su vida a su pasión literaria. “Nunca quiso quedarse en la sombra. Sus coetáneas firmaban con nombre masculino, pero ella no. En su primer año en Sevilla su seudónimo fue ‘La peregrina’. Y tras recibir dos premios bajo los nombres de sus hermanos en sus primeros textos, escribió una carta desvelando que aquellas obras las había escrito ella. A partir de aquel momento siempre firmó como ‘Gertrudis Gómez de Avellaneda’. Su deseo y su convicción era vivir de su profesión como el resto de hombres”, aplaude Lola López.

Como ya lo hiciera en los montajes ‘María la Jabalina’ (2017), dedicado a la última fusilada del franquismo, y ‘Encendidas’ (2019), en tributo a la poeta alicantina Paca Aguirre, Premio Nacional de Poesía 2011 y Premio Nacional de las Letras 2018, Lola López reivindica a mujeres excepcionales, pero desconocidas del gran público.

“En Cuba, donde nació cuando la isla era todavía española, no ha caído en el olvido, le han dedicado el Teatro Nacional y trabajan su obra en los estudios teatrales. En cambio, en nuestro país, el Teatro Español, inaugurado en 1849 con su obra ‘Saúl’, tiene un cuadro de Gertrudis, pero no cuelga en el salón de los retratos ilustres, sino a la entrada de la sala de peluquería y maquillaje”, lamenta la autora.

Un doctorado inacabado

López descubrió a Tula en 1995, durante un viaje a La Habana para representar ‘Libración’, con la que era entonces su compañía, Cae la sombra. El teatro en el que se había programado su obra era el Gertrudis Gómez de Avellaneda. “Nunca había oído hablar de esta dramaturga. Creí que era un inmenso agujero desconocerla tanto a ella como a su obra y cuando inicié mi doctorado con Josep Lluís Sirera la propuse como trabajo de investigación”, recuerda la creadora, quien ahora ha convertido aquella tesis en una dramaturgia.

‘Tula divina caótica Tula’ está construida a través de una selección de sus poemas y de varias escenas de tres de sus mejores y más exitosas obras: ‘Leoncia’, ‘Oráculos de Talía’ y ‘Baltasar’. La pieza también incluye un poema del padre de su única hija, el poeta Gabriel Díaz de Tassara.

“Lo más extraordinario y único en esta mujer es que su obra completa la publicó y estrenó en su corta pero intensa vida, y en su testamento legó toda su creación a la RAE, que años antes la había rechazado para ocupar la silla de Nicasio Gallego, su mentor”, detalla Lola López.

La representación está punteada de música. Javier Lázaro interpretará en directo tres canciones de la época. El leitmotiv es la primera habanera compuesta en el siglo XIX por Sebastián Iradier, contemporáneo de Gertrudis, ‘La paloma’. Este tema universal ha sido grabado por los músicos Elizaveta Mironova (piano), Aida García (chelo), Luisa Moya (violín), J. S. Chapi (percusión), Isabel Latorre (acordeón) y Antonio Picazo (saxofón).

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