Perejil cuesta al Estado español 5.937 millones de euros, presupuesto de Defensa en el 2014, que supone el 22% del total. Es muy importante gastar dinero en avioncitos y pistolitas para ir de comparsa por el mundo. Podrían enviar una Banda de Música de Valencia que por lo menos genera alegría y costaría mucho menos. Contrasta con el 2,7% que representa la dotación destinada a Cultura que asciende a 721 millones de euros en el mismo período.
La última que ha hecho el rey de los despropósitos, el maestro de las equivocaciones, el único ministro que acierta cuando rectifica, el Sr. Wert, es anunciar los recortes en las becas Erasmus. Le han obligado a rectificar cuando han visto la que se venía encima. Protestar sirve, está claro. En el asunto del IVA todavía no ha rectificado. Parece que esto no le importa ni a Wert, ni a Montoro, ni a Rajoy…ni a nadie con responsabilidad gubernamental. Lo que no sirve es un gobierno que no es capaz de disponer de 21 millones de euros para que los jóvenes puedan formarse en el extranjero. Les debe dar más réditos la ignorancia del pueblo. Sus hijos no tendrán problema para estudiar dónde les apetezca. Los hijos de sus administrados que no salgan de su barrio, como máximo a la capital de su provincia a estudiar religión.
El Círculo de Bellas Artes de Madrid, emblemático por su apuesta decidida por la Cultura en el sentido amplio de la misma, está sufriendo recortes año tras año y se encuentra en una situación más que dramática. La oposición intentó a través del Parlamento ayudarles pero se encontró con la barrera insalvable del grupo del Gobierno. ¡Nada que hacer!.
Encontré el pasado viernes a Zaplana en la entrada de un local de moda en Madrid charlando y riendo con una conocida presentadora de televisión, encantado de su vida. Con dos guardaespaldas. Feliz, como si no tuviera nada que ver con la situación a la que ha llegado Canal Nou. Como si la televisión valenciana no comenzó su torcidita andadura en la época en la que él era Presidente de la Comunidad. Y Camps…¿tampoco sabe nada?. Ahora llegan los mismos, Fabra, y se erigen en salvadores de las consecuencias de sus propios entuertos y de sus propias gestiones. ¿Y cómo lo hacen?. ¿Dimitiendo?. ¡Por favor!. No fueron al cole cuando se estudió la palabra dimisión, no la conocen. Televisión, que por cierto, desde el principio utilizaron para propaganda particular, para más loa de sus acciones y andanzas. La misma que pagó derechos faraónicos para la Fórmula 1, o la Copa del Mundo de Vela, las motos,…Cosas sencillitas…Pues, no. No dimiten. Simplemente lo pagan los de siempre, los trabajadores. Los más de 1.500 trabajadores que pasarán a ingresar las filas del paro.
Pondrán en marcha su maquinaria propagandística para explicar tranquilamente cómo los radicales son los causantes de todos los males de España. Los radicales, los sindicalistas, los rojos, los anarquistas, los del 15 M, los del escrache, los parados… Lo que si hay que reconocerles es su aportación a la gobernabilidad del mundo. Han inventado e implantado un sistema: la Dictadura legitimada por las urnas. El estado ideal, ¿cómo les habrá costado tanto tiempo darse cuenta?. Pero no nos preocupemos porque sí seguirá habiendo dinero para Perejil.
Nota del editor: Perejil es una diminuta isla muy cercana a Maruecos de titularidad española que sufrió un incidente militar hace unos años cuando unos marroquies la tomaron y reivindicaron y España mandó a sus tropas a rescatarla.
