Desnudez y revolución danzan en el Festival de Almada
Veo, por segunda vez, en el 42º Festival de Almada, ‘Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer’ (Hay algo a punto de suceder) de Victor Hugo Pontes. La primera fue en el Teatro Nacional São João do Porto, el 2 de marzo de 2025, y vuelvo a experimentar la misma sensación de goce revolucionario.
‘Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer’ es una coreografía que desafía, en sus implicaciones estéticas y éticas, el estado actual de libertad. O, dicho de otro modo, es una pieza de danza que no podría representarse en un país con restricciones a las libertades fundamentales, como la libertad de expresión, o bajo las normas de decoro dictadas por la moral religiosa que prohíben la exhibición del cuerpo desnudo. Porque en esta pieza de danza hay quince personas completamente desnudas, no solo sus cuerpos.
La desnudez aquí es una metáfora transparente de la libertad, no solo en sus fundamentos, sino también en términos de desjerarquización, de igualdad entre las personas, eliminando las signos socioculturales y económicos que conlleva la ropa y otros elementos con los que nos vestimos. De hecho, aunque parezca paradójico, esta igualdad en la desnudez de los cuerpos es también una afirmación de la materialidad, de la carnalidad y, por extensión, de la verdad más esencial, en su respectiva diversidad. Por lo tanto, nos encontramos ante una comunidad danzante que nos sorprende y cautiva con su horizontalidad diversa, con su unidad en la diferencia. Este es un principio básico de una verdadera democracia: igualdad y respeto por la diversidad. Esto, en mi opinión, queda muy claro en ‘Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer’.
En el programa de mano podemos leer las siguientes palabras de Victor Hugo Pontes, extraídas del periódico ‘Público’, con motivo del estreno de esta coreografía: «Esta pieza solo es posible porque vivimos en libertad, e incluso eso ya está siendo cuestionado». No podría decirse de forma más directa y clara, refiriéndose a la potencia inherente al objeto artístico en cuestión. Y tampoco podemos ignorar la advertencia que nos lanza el creador de Guimarães, que podemos rastrear incluso en el propio título: ‘Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer’. De hecho, si no nos detenemos a reflexionar sobre la importancia de no perder los derechos y libertades fundamentales que esta pieza de danza expone, podríamos retroceder a tiempos tan oscuros, violentos e inhumanos como los de la dictadura.
Hay quien dice que la historia es cíclica. Por lo tanto, depende de nosotros no caer en la inercia automática de lo cíclico y, tras haber alcanzado cierto bienestar con gran esfuerzo, volver a las dificultades de una vida dominada por el miedo.
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e hecho, “Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer” es un verso de la canción “Inquietação” (Inquietud) de José Mário Branco (1942-2019), uno de los cantautores más representativos de las canciones de protesta durante la dictadura de Salazar, y de las aspiraciones revolucionarias.
En este verso también se percibe el pulso revolucionario, de que algo se está gestando y está a punto de suceder. Por lo tanto, la inquietud está garantizada: el título y la coreografía misma constituyen una ecuación que nos despierta a una resolución que podría ser feliz, pero también podría no serlo. De hecho, el final de la pieza es la comunidad danzante completa cantando en la lengua franca, ahora considerada internacional —el inglés—, un tema tan popular como elocuente en relación con estas inquietudes: «I want to break free», de la banda británica Queen. Un «I want to break free», que pasa del singular de «I want» a la primera persona del plural, de esta comunidad en el escenario, mirándonos con toda la energía acumulada a través de la danza, para desafiarnos con euforia y alegría contagiosas: «Oh, I want to be free». Un «yo» que, en ‘Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer’, se ha transformado fascinantemente en un NOSOTRES con mayúsculas, porque es el nosotras/os/es el que hace un país, el que nos constituye como cuerpo social y fundamento de la democracia. Una democracia plenamente capaz de mostrarse desnuda, sin más defensas ni refugio que la conciencia de que la vulnerabilidad y la fragilidad del cuerpo desnudo deben aceptarse. Porque tener que protegerse, abrigarse o tener que luchar ya implica, si observamos con atención los detalles, un contexto en el que pueden reinar la agresión, la desconfianza, la guerra, el miedo y la vergüenza por quienes somos.
Porque, ante todo, somos cuerpos. Porque, antes que nada, venimos al mundo desnudos, tal como lo dejamos. Es una pena que, en este corto tiempo que nos ha sido dado para vivir y “ser humanos”, tengamos que luchar, competir, defendernos, desconfiar, protegernos, actuar como si no fuéramos vulnerables, actuar como si fuéramos infalibles, etc.
‘Há Qualquer Coisa Prestes a Acontecer’, además, es un viaje a través de la historia, tomando canciones y algunas citas coreográficas que fueron revolucionarias para la danza, que podrán ser reconocidas por las personas más eruditas en este arte. Pero que, para cualquier otro espectador, sin tal erudición, resultarán igualmente fascinantes.
De lo poco que pude reconocer, lejos de cualquier erudición, no es necesario saber, por ejemplo, que lo que vemos se refiere a ‘La consagración de la primavera’ de Igor Stravinsky, y a las citas dancísticas de Vaslav Nijinsky, bailarín y coreógrafo del estreno de este ballet de la compañía Ballets Russes de Sergei Diaghilev, en el Théâtre des Champs-Élysées de París en 1913, o ‘The Rite of Spring’, estrenada posteriormente por Pina Bausch en 1975 en la Opernhaus Wuppertal, para que sintamos, en esta música y estos movimientos, la confabulación de fuerzas primigenias que nos ciñen a la tierra, clamando por la unión y la libertad. También a la primavera en la que floreció la Revolución de los Claveles, y a todas las primaveras que simbolizan el despertar y el feliz resurgimiento de la naturaleza.
No es necesario conocer ni reconocer la referencia iconográfica del cuadro de Eugène Delacroix titulado «La Libertad guiando al pueblo» para sentir el vigor de quien desea avanzar y progresar.
Tampoco es necesaria, como ya he señalado, erudición artística para emprender este viaje, a través de cuadros tan coreográficos como teatrales, por su elocuente composición, para que, finalmente, toda esta plétora de belleza despierte y estimule nuestra sensibilidad hacia lo más importante que tenemos: la libertad.
P.S. – Artículo relacionado:
“Cuerpo colectivo desnudo y revolución, por Victor Hugo Pontes”. Publicado el 15 de marzo de 2025.
“Ojo a las corporalidades. 13 GUIdance” (‘Bantu’ de Victor Hugo Pontes). Publicado el 5 de febrero de 2024.
“La danza como catalizador. Rui Lopes Graça y Victor Hugo Pontes en la CNB. La Ribot Dançando com a Diferença”. Publicado el 7 de octubre de 2019.
“Cuestión de confianza. IX GUIdance 19. Victor Hugo Pontes. Maurícia Neves. Miguel Moreira. Jonas & Lander. Joana Von Mayer Trindade & Hugo Calhim Cristovão”. Publicado el 25 de febrero de 2019.
“Danzar desde los márgenes, según Victor Hugo Pontes”. Publicado el 7 de mayo de 2018.
“¿Es posible la abstracción despersonalizadora? Uníssono de Victor Hugo Pontes”. Publicado el 10 de junio de 2017.
“Carnaval y danza con Victor Hugo Pontes”. Publicado el 11 de julio de 2016.
“El arte de la caída según Victor Hugo Pontes”. Publicado el 10 de abril de 2015.

