Alarcón y Cornelles estrenan una nueva versión de ‘Las amistades peligrosas’

La obra aporta una mirada contemporánea al juego de seducción y poder de esta célebre pieza
Del 22 al 25 de mayo el Teatro Rialto de Valencia ofrece el estreno absoluto de Las amistades peligrosas, una versión de la compañía valenciana alarcón&cornelles firmada por Jerónimo Cornelles y Maribel Bayona. Aportando una mirada contemporánea para dar relieve a problemáticas que conectan el siglo XVIII con el XXI, este nuevo montaje permite descubrir que, en la historia escrita en formato de novela epistolar por Pierre Chorlelos de Laclos en 1782, hay mucho más que juegos de seducción.
Con tan solo 15 días de margen, en pleno mes de agosto, surgió el primer borrador para acercarse a esta historia que, en el momento de su publicación, no alcanzó demasiado éxito, quizás por ofrecer un retrato demasiado realista de ciertos personajes de los entornos de poder de la época. Pero que un par de siglos más tarde popularizaron célebres adaptaciones cinematográficas, series o incluso una ópera.
Por eso, uno de los grandes retos de este proyecto escénico era darle una personalidad propia. «Empezamos sintetizando, porque había muchísimas subtramas. Luego teníamos que transformar las cartas en acción y presente, que es lo que caracteriza al teatro», explican los coautores del espectáculo, para quienes el momento crucial vino justo después. «Con todo ese material de base, nos preguntamos qué queríamos contar nosotros», señala Bayona, a lo que Cornelles añade la importancia de hacerlo sin estar «intoxicado» por versiones anteriores «y aprovechando todos los recursos que ofrecen las artes escénicas».
Trabajando mucho y de forma verdaderamente colaborativa, metiendo mano en los textos del otro con total libertad, llegaron a una versión cuya clave es la mezcla de temas, reflexiones y elementos contemporáneos con los de época. Un devenir fluido entre presente y pasado.
El público va a encontrar alusiones al techo de cristal que impedía (entonces y ahora) a las mujeres poderosas alardear de sus victorias. También aparece el doble rasero para aspectos como el edadismo o la sexualidad, donde las féminas sufrían (y sufren) muchísimas más críticas que sus compañeros masculinos. Además, se muestra una constante preocupación por las apariencias y la fascinación por la maldad, por quienes manipulan sin escrúpulos. «La obra se dedica a crear un universo propio y el espectador puede (o no) hacer sus conexiones con personas o situaciones que reconozca. Al final, el teatro es un espejo donde la sociedad, si está preparada, puede mirarse. Pero si lo prefiere, simplemente puede disfrutar del espectáculo», sostiene Cornelles.
Luis Crespo firma la escenografía, Pablo Fernández la iluminación, Fede Caraduje los audiovisuales, Marina Delicado el espacio sonoro y Pascual Peris el atuendo de los personajes, a los que dan vida Rafa Alarcón (Vizconde de Valmont), Rebeca Valls (Marquesa de Marteuill), Cristina Esteve (Cécile de Volanges) y la propia Bayona (Madame de Tourvel). Un equipo artístico dirigido por Jerónimo Cornelles, quien ha contado con la mirada externa de todo un referente del teatro contemporáneo, Andrés Lima. Y con Santiago Ribelles en la asesoría de movimiento y la ayudantía de dirección.
«Rafa Alarcón y yo fundamos esta compañía para trabajar con gente a la que admiramos, con la que tenemos ganas de involucrarnos a nivel creativo. Y estamos muy agradecidos por haber podido reunir a un equipo de primer nivel», argumenta Cornelles sobre el cuidado que se ha puesto en cada uno de los detalles de la pieza.
Todo está calibrado. Los gestos y maneras de desplazarse sobre el escenario de diferentes personajes, demostrando en unos momentos su clase social, en otros los instintos que les mueven. Los sutiles guiños estéticos a iconos como Caperucita o las dominatrix. Y las escenas en las que los actores se desdoblan, estableciendo un juego metateatral que interpela al público, opinando sobre lo que ocurre en escena, haciendo que la trama «dialogue con el presente y con nosotros mismos», según Bayona.
Porque la sensualidad y el amor atraviesan esta historia, pero se cuenta mucho más. Todo arranca con el reto entre dos viejos amantes de la nobleza entre los que ha crecido un vínculo de amistad especial. Ella le pide que seduzca a la futura esposa de un hombre que la deshonró, haciendo público su romance. Si lo logra, ganará los favores de la doncella y los suyos, en recompensa. Pero lo que empieza como una travesura crecerá en una competición donde lo que está en liza no es el sexo, es el poder.
Con cuatro únicas funciones, del 22 al 25 de mayo en el Teatro Rialto de Valencia, antes de viajar a la Fira d’Arts Escèniques de la Comunitat Valenciana – Mostra de Teatre d’Alcoi, arranca esta semana la exhibición de esta pieza, séptima en la producción de la compañía valenciana, que plantea un juego de seducción y repulsión que podría ambientarse en cualquier lugar.