Reportajes y crónicas

Crónica de Iván Prado desde Caracas

Iván Prado se reencuentra con Leo Bassi de camino a Caracas
Nos encontramos en la zona de embarque de Barajas y Leo llega acompañado de su hija Liza. Él pletórico, ella muy emocionada y yo en un estado de calma chicha. Semeja que aun no asumí que voy a participar en una aventura singular, de las que a mí me alimentan, el primer contacto del clown-bufón más importante de nuestro tiempo con la revolución bolivariana.
Abrazos, besos, las primeras risas y una breve explicación de nuestro itinerario. Participaremos en el festival internacional de circo de Caracas, en el que Bassi hará de presentador en la gala oficial, impartirá un curso y actuará en una de las plazas emblemáticas de la ciudad. Por lo de pronto Liza y yo ayudaremos en la producción y en el apartado técnico y segundo parece Leo ha previsto alguna aparición mía en escena.
Compartir escenario con él siempre es algo emocionante, ya sea cómo presentador (como cuando hicimos la gira por Galicia contra el Prestige) o como compañero de performance dentro de la semana de filosofía de Pontevedra. Pero si además puedes actuar de aquella sin lugar a dudas a cosa gana mucho.
Mi historia con Leo viene de viejo. De hecho, el Festiclown le debe mucho a este artista total, comprometido e irreverente. Recuerdo cuando lo conocí en el hall del teatro principal de Pontevedra, en la primeria edición del festival hay casi 10 años. Sin conocerlo de nada me salió del alma darle un abrazo en plan camaradas bajo su mirada de asombro. Entre ese abrazo y este avión que nos lleva a Venezuela hubo cenas, debates, viajes en furgoneta ideando un show sobre Fraga, ruedas de prensa y muchas horas en los camerinos de distintos teatros, y ahora que lo recuerdo, incluso un curso agridulce donde pude recibir las enseñanzas de este maestro de la comedia. Pero lo que siempre me sorprendió de él fue su humanidad, brillante en lo intelectual y valiente en el contacto con el mundo.
No sé como es la ciudad ni como será el festival, pero de lo que estoy seguro es que vamos a vivir momentos históricos : el encuentro de la fuerza creativa de Leo con la belleza de una revolución en marcha.

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