Rakel Camacho estrena en Almagro una versión de ‘Fuenteovejuna’ que pone el acento en la trama política

Es una producción de la CNTC, que presenta cinco obras en el Festival de Teatro Clásico
La 48ª edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro acoge el estreno de ‘Fuenteovejuna’, bajo la direccion de Rakel Camacho, un montaje de la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC), que también presenta en este certamen las obras ‘Los dos hidalgos de Verona’, ‘La fortaleza’, ‘Don Gil de las calzas verdes’ y ‘Farra’
Con el estreno de ‘Fuenteovejuna‘ -del 3 al 13 de julio en el Teatro Adolfo Marsillach- arranca la nueva etapa de la CNTC bajo la dirección de Laila Ripoll, quien ha destacado, en una rueda de prensa celebrada en Almagro, que todas estas obras tocan «temas que nos apelan, que nos remueven y nos conmueven».
Publicada en 1619, ‘Fuenteovejuna‘ se inspira en un hecho histórico ocurrido en 1476: la revuelta de un pueblo contra la tiranía del comendador Fernán Gómez, quien abusa de su poder con total impunidad. Sin embargo, la historia trasciende su contexto histórico para convertirse en un canto a la resistencia colectiva. ‘Fuenteovejuna‘ es una de las grandes obras maestras de Lope de Vega y un pilar fundamental del Siglo de Oro. Por primera vez este título está dirigido en la CNTC por una mujer, Rakel Camacho.
«Es obvio que la violencia machista continúa en nuestros días, y que tenemos que frenarla como sea, pero me parecía muy importante encontrar el nexo de la obra con nuestros días», explica Camacho. «Por eso me parecía importante la trama política, que a veces no es muy tenida en cuenta, ese cambio del sistema feudal a la monarquía que en ese momento se entendía como progreso. La violencia es una cuestión política, es una cuestión de Estado cuando violencia y política son inseparables, eso es lo que te salpica y lo que Lope cuenta de una forma tan exacta que nos interpela en nuestros días», asegura.
Su protagonista, Chani Martín, añade que lo que más me ha sorprendido de la visión de Rakel Camacho es que «ese contexto de guerra se contrapone al contexto de amor que representa el pueblo». «He tenido todo el rato la sensación de que el Comendador entra a distorsionar, a imponer su ley, aprovecharse de sus ventajas e imponer sus límites, sobre todo con las mujeres».
Lucía Carballal y ‘La fortaleza’
También este fin de semana se representará ‘Los dos hidalgos de Verona’, dirigida por el británico Declan Donnellan. En palabras de Irene Serrano, una de sus actrices, «aunque es uno de los primeros textos de Shakesperare y hay quien lo considera una obra menor, Declan nos transmitía que en esta comedia ya está todo Shakesperare, todo su interés por el alma humana». «De primeras lees el texto y puede parecer un tanto superficial en algunos aspectos pero luego te das cuenta de que reflexiona mucho sobre qué es el amor», completa su compañera de reparto Rebeca Matellán. «Declan decía en los ensayos que la forma más bella de amor es poner atención a la otra persona», continúa.

La próxima semana será el turno de ‘La fortaleza‘, escrita y dirigida por Lucia Carballal, que recuerda que este espectáculo nace de un diálogo con ‘El castillo de Lindabridis‘ de Calderón de la Barca. «A partir de su argumento sentí que podía hablar de esa herencia que tenemos como autores contemporáneos, que es tan valiosa como pesada, y de cómo nos relacionamos con ella», analiza. «Y como última capa está mi historia personal con mi padre, que también dejó una herencia compleja: un arquitecto de éxito que me inculcó el respecto por el clasicismo y la cultura pero que también fue un padre ausente. Esta capa más biográfica abre la pregunta más importante para mi en ‘La fortaleza‘ que es si podemos leer el pasado con las palabras del presente».
También durante el segundo fin de semana se representará ‘Farra’, «un sueño», asegura nada más empezar a hablar su director, Lucas Escobedo. «Queríamos que fuera una fiesta de celebración, pero no sabíamos de qué», rememora, hasta que recordó un texto: «no hay nada que celebrar, hay que celebrarlo todo». «Nos inventamos la excusa dramatúrgica de que viene el rey a ver la función. Al final no viene pero no pasa nada: el lenguaje del payaso permite que todo siga, que no pase nada». Escobedo señala también que, aunque han manejado muchos textos aúreos en la creación de esta pieza, en la base está ‘El viaje entretenido’, de Agustín de Rojas, sobre el viaje de unos cómicos en el Siglo de Oro: «Narra muchas experiencias en las que podemos reconocernos», afirma.
Finalmente, en la segunda quincena del mes podrá verse ‘Don Gil de las calzas verdes’, de Tirso de Molina, con la Joven Compañía dirigida por Sarah Kane, que ha realizado también la versión junto a Brenda Escobedo. «Es una comedia preciosa, barroca e inteligente en la que el enredo es una estrategia femenina para que un hombre mantenga su palabra», explica Escobedo.
«La propuesta de Sarah Kane es que Don Gil, que es un personaje muy teatral, se dividiera en tres actrices, lo que lo hace muy interesante por la perspectiva de distinguir qué ve el público y qué no ve el personaje que está en escena. Es un ejercicio muy moderno y muy interesante».
Estas representaciones supondrán la despedida de la sexta promoción de la Joven Compañía después de cuatro años de trabajo y que se celebrará con un evento muy especial en el Corral de Comedias el día 25 de julio.