Festivales

Los tambores abrieron el V Mercado Cultural de Bahia

Con la intervención de diferentes personalidades del mundo de la cultura y la política que con cortos discursos dejaron a las claras la intención de ser cruce de culturas del V Mercado Cultural de Salvador de Bahia que se celebrará hasta el prõximo día 7, dando paso a un gran pasacalles con diferentes conjuntos de música de percusión que recorrieron el centro de la ciudad, quedando inaugurado oficialmente el evento. La música, el teatro, la danza y las artes plásticas de Brasil y de todo el mundo tienen una cita entre los días 2 y 7 de diciembre en Salvador de Bahía, donde tendrá lugar la mayor feria de la cultura latinoamericana, un espacio para la exhibición, promoción, intercambio y participación en seminarios y workshops. Se prevé que en esta quinta edición del Mercado Cultural, Bahía reciba la visita de más de mil artistas y productores brasileños e internacionales, que podrán disfrutar de un sinfín de propuestas artísticas. Pero no lo harán solos. Los organizadores prevén que alrededor de sesenta mil personas concurran a los espectáculos de calle cada día y que treinta mil presencien los trabajos que se presentan en espacios cerrados.
El Mercado Cultural es la consecuencia a las siete ediciones de un festival, denominado inicialmente Via Bahia Festival y que tras fundirse con otro evento, la Celebración de la Herencia Africana, se convirtió en el 1999 en el encuentro actual, cuyas metas son reforzar los talentos, diseminar la cultura, crear un caudal de distribución y cooperación cultural, además de alimentar el diálogo, el intercambio cultural y las oportunidades de negocio. Se trata de un encuentro promovido por el instituto Casa Via Magia, una institución sin ánimo de lucro, y en el que participan, entre otros, La Red de Promotores Culturales de Latinoamérica y el Caribe, la Fundación Ford, la Red Cultural del Mercosur y el Foro Europeo de Festivales de Músicas del Mundo.
En su quinto año, el Mercado Cultural reunirá a un millar de agentes culturales, desde artistas, periodistas, productores, directores de centros culturales, festivales e instituciones en torno a un programa de seis días de duración, en el que se mostrará una selección representativa del circuito autoral e independiente del teatro, música, danza y artes visuales brasileñas e internacionales. Sumando las correspondientes a cada disciplina, rondarán las ochenta funciones, que se llevarán a cabo en los principales teatros de la ciudad como el Acoustic Shell y el Main Hall, a los que se incorporan las plazas de Pelourinho como espacio a cielo abierto. El tema elegido para esta edición: “Diálogos en el tiempo”. Idea que remite a la ancestralidad y sus interlocuciones con las diferentes épocas, fases y movimientos, de lo tradicional a lo contemporáneo.
Del títere al performance
La oferta teatral está compuesta por nueve espectáculos, de los que cinco proceden de las ciudades de Rio de Janeiro, São Paulo, Rio Grande do Norte y la propia Bahía, que como anfitriona tendrá doble representación: la compañía Buffa con la tragicomedia clownesca Joguete, montada a partir de Fin de partida de Beckett, y Da Rin Produções Culturais con Lampião e Maria Bonita, basada en el personaje mítico de un bandido al que el pueblo ha convertido en héroe. La actriz carioca Beth Goulart dará vida a Dorotéia Minha, personaje inspirado en las cartas de amor escritas por el dramaturgo Nelson Rodrigues. La representación brasileña se completa con dos espectáculos de títeres: el de Chico Daniel, de la compañía de Rio Grande do Norte Terramar, que acudirá con Proyecto Conexão Felipe Camarão, que se basa en la herencia del arte del mamulengo y que busca revitalizar, preservar y difundir la cultura entre los jóvenes, mientras que las compañías Cidade Muda y Circo de Bonecos presentarán el espectáculo A nova turnée, obra gestual en la que los muñecos recrean el mundo del circo con sus domadores, trapecistas, equilibristas, contorsionistas y acróbatas.
En el apartado internacional, la compañía valenciana L’Om-Imprebis mostrará La mujer invisible, un crudo monólogo sobre la emigración a cargo de la actriz brasileña Rita Siriaka. La balear Au ments presenta Voice void, un inquieto espectáculo de teatro gestual sobre la cultura fragmentaria, el zapping y el consumo rápido que empujan al ser humano a un creciente individualismo. Los alemanes de la compañía Angie Hiesl Produktion realizarán su performance teatral-visual x-vezes gente cadeira, que coloca a personas de entre 60 y 89 años sentadas en sillas acopladas a fachadas de edificios, a seis metros sobre las cabezas de los transeúntes y al tiempo que realizan tareas cotidianas de su día a día, mientras que la sección teatral la cierran los eslovenos de Mladinsko Theatre. Su propuesta, titulada Silence silence silence, es una reacción a la crisis del lenguaje, un teatro visual, al que dicen de otro planeta, y con una estética que remite a la alucinación.
Mundos coreografiados
En lo que a la danza se refiere, destaca la gran presencia brasileña, ya que de la decena de coreografías a verse tan sólo hay una que no lo es, la de los venezolanos Neodanza, que presentan en Aquellos los otros una mezcla de elementos plásticos y visuales con la danza. Del resto, se prevé una gran presencia de compañías cariocas, como la veterana Carlota Portella Vacilou Dançou, que llevará su Grito, trabajo de danza contemporánea que viene a sumarse a las más de viente propuestas creadas por la compañía en otros tantos años de existencia; o la compañía de Marcia Rubin que en Tempo de valsa, moderado com elegância realiza una serie ininterrumpida de diseños tridimensionales producidos por los cuerpos de las intérpretes en relación con la música, el espacio y el movimiento; o la coreógrafa Regina Miranda, quien explora en Pernas vazias las posibilidades de diálogo entre cuerpo y palabra ofreciendo una propuesta de danza-teatro inspirada en la novela Las Olas de Virginia Woolf; o el solo de la coreógrafa y bailarina Cristina Moura Like an idiot, un enfrentamiento entre intérprete y espectadores.
Minas Gerais es otra de las ciudades brasileñas con notable representación en el Mercado Cultural. De allí provienen 1º Ato, quienes en la humorística Isso aqui não e Gothan City introducen al espectador en el submundo de una metrópolis imaginaria habitada por héroes y villanos. También proceden de Minas Gerais las compañías Quik y SeráQué? Los primeros proponen en Rua una serie de escenas y situaciones diversas pasadas en la calle, variando entre lo cómico, lo lúdico, lo dramático y lo violento, en tanto que los segundos dividen su Insólito en dos coreografías que comparten su intención de crear una discusión filosófica sobre el quehacer artístico.
Citas al son de la música
Las propuestas dancísticas se completan con la de los pernambucanos Grial y su Folheto V – Hemisfério sol basada en la danza erudita realizada a partir de las raíces populares brasileñas, y la de Tran Chan, naturales de Bahía, que tienen como tema de su Brancos e Augustos la personalidad fronteriza de personajes de la literatura sicoanalítica y las relaciones del ser humano cuando se encuentran en la línea entre la realidad y la fantasía.
Además de teatro y danza, el Mercado cuenta como tercer eje exhibitivo una ingente cantidad de propuestas musicales llegadas de todos los puntos del planeta, que comenzarán en el mismo acto inaugural donde se congregarán los grupos de percusión de Bahía en el espectáculo al aire libre Tambores en el tiempo. Cabe mencionar, también, la presencia de músicos como Eliseo Parra, el percusionista neoyorkino Daniel Moreno, la jazzista argentina Mariana Baraj, la suiza Laurence Revey, el pianista uruguayo Leo Maslíah o los cubanos Los jubilados, entre muchas otras actividades que acompañan a las estrictas para hacer de esta cita el mercado que es. De hecho, a lo largo de los seis días se podrá participar en una veintena de encuentros y conferencias que se presentan como una oportunidad para el intercambio, presentaciones de libros, una quincena de workshops dirigidos por algunos de los artistas que participan en los espectáculos programados y la FALA, la Feria de las Artes, el centro de negocios y oportunidades del mercado cultural constituido por los 80 stands sitos en el patio externo del Teatro Castro Alves.

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